miércoles, 30 de septiembre de 2009

Canción de Otoño

Las horas van pasando con extraña exactitud,
Las hojas van cayendo con el fuerte viento sur,
La calle de los barrios se ha vestido de quietud,
La gente va pasando... buscando un poco de luz.

La tarde se ha vestido con la fría oscuridad,
El gato se ha escondido anunciando tempestad,
Llueve en los tejados de toda la capital,
Un viejo pide abrigo... un niño pide pan.

Y en el parque dos amantes que se abrazan y juegan a enamorarse,
Mientras la briza toca; sus manos y sus bocas,
Van sellando tanto amor...
Y al lado un mendigo busca cosas,
Mientras alguien pinta el cielo,
De color y extrañas formas,
Y el olor a sangre fría me provoca,
Y hay recuerdos que me evocan,
Y hay recuerdos que me evocan un adiós.

La noche que no cede y yo camino en soledad,
En la esquina un brujo pide un poquito de bondad,
Un mago saca fuego y un cigarro pa' fumar,
Mientra algunos esperamos algún sueño pa' volar.

Todo día, toda tarde, toda noche queda atrás,
Quizás mañana tenga que morir para salvar,
Mientras algunos se apresura para ir a descansar,
A otros se les llueve el alma... y la vida sin piedad.

Y en el parque dos amantes que se abrazan y juegan a enamorarse,
Mientras la briza toca; sus manos y sus bocas,
Van sellando todo amor...
Y al lado un mendigo busca cosas,
Mientras alguien pinta el cielo,
De color y extrañas formas,
Y el olor a sangre fría me provoca,
Y hay recuerdos que me evocan,
Y hay recuerdos que me evocan un adiós.

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